Eres el conductor de un tanque. Pero de uno muy especial. Sube por las paredes. Dispara a los obstáculos que te encuentres por el camino. Y llega al final del recorrido. Es casi imposible volcar con un tanque de goma...
Lanza la bola intentando que rebote en el mayor número de paredes posibles sin tocar las demás pelotas. Cuanto más rato esté en el aire, más puntos te llevas.